¿Qué es?
“Las sufragistas” es una reconocida película británica dirigida por Sarah Gavron y estrenada en el 2015. Este drama nos muestra los primeros pasos del movimiento feminista que luchó por el sufragio femenino a principios del siglo XX en Inglaterra. Siendo ganadora de numerosos premios, esta película se posiciona entre las más reconocidas dentro de las producciones que tratan sobre los derechos de las mujeres.
¿Por qué verla?
Esta película nos brinda una mirada histórica sobre uno de los procesos muy influyentes para el movimiento feminista y para nuestro sistema democrático, desde el comienzo nos muestra con realismo el nivel de opresión que sufrían las mujeres en ese tiempo. Esta opresión se hace visible en el rol que ocupaban las mujeres en la dinámica familiar, en la carencia de derechos laborales, en la naturalización de los abusos por parte de los varones y muchas situaciones más.
Este contexto nos ayuda a mirar con mayor claridad nuestra realidad, acompañar las causas orientadas al bien común y volver a valorar el derecho al voto. Cada escena nos muestra cómo este proceso se desarrolló en la tensión entre un cultura intrínsecamente machista y un movimiento conformado por mujeres dispuestas a luchar por sus derechos civiles y políticos.
Dentro de esta historia también se nos presenta un personaje muy significativo, el de una joven trabajadora llamada Maud. Esta chica desde el taller en el que trabaja va tomando conciencia de el movimiento feminista y progresivamente se irá involucrando en su causa principal: el voto femenino.
¿Qué mensaje de Dios nos transmite?
El mensaje que deja esta película nos invita a adentrarnos en el camino de un movimiento que supo resistir y luchar frente a la opresión, detrás de cada escena se vislumbra la búsqueda de una liberación real. También nos invita a ponernos en el lugar de esas mujeres e ir acompañando, cada uno/a desde su lugar, los pasos de un movimiento que se ofrece como respuesta a los sistemas de exclusión y opresión.
Desde una mirada cristiana podemos ver cómo entre tanta injusticia se va gestando la semilla del Reino en aquellas mujeres que eligen movilizarse por sus derechos y por los de quienes las sucederan. La sororidad es uno de los elementos claves de la película, ella se hace presente en los gestos de compañerismo de las mujeres que, sufriendo lo mismo, se acompañan y ayudan mutuamente. Es el sueño de igualdad es el que va iluminando la búsqueda del derecho al sufragio y el crecimiento del movimiento feminista frente a la indiferencia de la estructura política.
Por: Alejandro Dodera